Aguas dulces y saladas, aguas excelentes que conservan sus propiedades naturales desde hace miles de años en una zona privilegiada, que aporta la ostra de San Vicente los nutrientes necesarios y los microorganismos para que su sabor y textura sean consideradas en todo el mundo.
Gran parte de la producción de ostras originadas en San Vicente de la Barquera se exporta a Francia, considerada la élite del mercado de este manjar. La razón: la calidad del mismo y el esmero con que son criadas dentro de un magnífico parque de cultivo y utilizando técnicas innovadoras.
El aroma inconfundible del ambiente al que pertenece, evoca los recuerdos de nuestra relación más íntima con el mar.
Óscar y su equipo han podido desarrollar un profundo conocimiento sobre este producto, elevando las elaboraciones a un nuevo nivel. Platos sorprendentes y con sutiles contrastes que dejan en la memoria recuerdos difíciles de olvidar.